Una conducta sexual compulsiva es un problema serio que no solo afecta a quienes la padecen, sino a todo su círculo cercano. Este problema lleva a quienes lo sufren a no poder controlar los impulsos sexuales, dando una serie de comportamientos destructivos y a una sensación de pérdida de control.
Como pasa con todas las adicciones, el primer paso es reconocer el problema y buscar ayuda para poder gestionarlo. En Cúvel Adicciones sabemos de la complejidad de esta situación y estaremos a tu lado para ofrecerte el apoyo y las soluciones que necesitas.
¿Qué es la adicción al sexo?
Antes de empezar a profundizar en el tema vamos a ver en qué consiste exactamente. La adicción al sexo, o hipersexualidad, es un trastorno que sufren aquellas personas que tienen una obsesión incontrolable con las actividades sexuales. No solo se da con actos sexuales, sino que puede ser mediante pensamientos, compulsión por consumir pornografía, necesidad de buscar nuevas parejas o una urgencia por masturbarse repetidamente. El problema viene cuando estas conductas comienzan a afectar tanto a la salud mental como física del individuo, llegando a perjudicar sus relaciones y su vida diaria.
Es importante saber que no es solo un deseo por una actividad sexual concreta, sino que llega a ser una necesidad compulsiva que no puede controlar. Esto puede terminar causando sentimientos de vergüenza, culpa y desesperación.
La adicción al sexo no es diferente a otras adicciones como la drogadicción o el alcoholismo, por lo que debe ser tratada por profesionales para poder ponerle una solución y tratar el problema como es debido.
Causas de una conducta sexual compulsiva
Conocer las causas puede ayudarnos en gran medida a saber dónde está el problema, ya que dependiendo de que lo está causando el tratamiento para superarlo puede ser muy diferente.
- Factores biológicos: Los niveles de hormonas y el cerebro pueden influir en gran medida en el comportamiento sexual de las personas. Hay muchos estudios que dicen que ciertos desequilibrios químicos en el cerebro están directamente vinculados a la hipersexualidad.
- Experiencias traumáticas: Aquellos que hayan sufrido abusos sexuales, emocionales o físicos pueden llegar a desarrollar malas conductas sexuales como forma de lidiar con el trauma.
- Problemas psicológicos: Una conducta sexual compulsiva puede venir derivada de otros trastornos tales como la depresión, la ansiedad y el trastorno obsesivo-compulsivo o TOC, ya que puede ser la manera que ha tenido nuestra mente de escapar o aliviar este malestar emocional.
- Influencia del entorno: En ciertas etapas de nuestro desarrollo sexual pueden darse comportamientos que nos lleven a sufrir este problema. La pornografía en edades muy tempranas o crecer en ambientes donde la sexualidad no se maneje de la forma correcta son ejemplos claros de este problema.
- Falta de habilidades de afrontamiento: La falta de habilidades sociales o una mala gestión del estrés o emociones negativas también pueden derivar en una conducta sexual compulsiva.
¿Qué síntomas presenta?
Entre los síntomas típicos de adicción al sexo se encuentran:
- Pensamientos sexuales constantes: Los pensamientos de la persona interfieren en su vida diaria.
- Comportamientos sexuales compulsivos: Se comete a pesar de las consecuencias para el bienestar, el trabajo o las relaciones.
- Búsqueda de sexo sin importar las consecuencias: El individuo participa en comportamientos sexuales de riesgo o inapropiados, que incluyen tener múltiples parejas sexuales, utilizar servicios de prostitución o participar en actividades sexuales en lugares públicos
- Abandono de responsabilidades: Tomar demasiado tiempo para atender el sexo, lo que resulta en una falta de compromiso con el trabajo, la escuela o la familia
- Vergüenza y culpa: Sensación recurrente de vergüenza o culpa por las actividades sexuales, pero incapacidad para detenerlas
- Aislamiento social: Evitar relaciones sociales o familiares para participar en actividades sexuales solitarias, como mirar pornografía.
Tratamiento para la adicción al sexo
Como hemos visto, la adicción al sexo es un problema que puede darse por muchos motivos diferentes, por lo que el tratamiento para el mismo deberá ir siempre con un enfoque totalmente personalizado para cada persona. Vamos a ver ahora los tratamientos más comunes teniendo en cuenta que cada uno puede ser mejor para un tipo concreto de paciente.
- Terapia cognitivo-conductual (TCC): Esta terapia es realmente útil para que las personas puedan identificar y cambiar ciertos patrones de pensamientos y comportamientos que le lleven a sufrir este problema, por lo que es muy efectiva para ayudar a las personas a reconocer los desencadenantes de sus impulsos y poder hacer un plan de desarrollo de estrategias para gestionarlo de la mejor manera.
- Terapia de grupo: Es importante que la persona sepa que no está sola, por lo que participar en grupos de apoyo con personas que están sufriendo lo mismo puede proporcionar una red de compresión y de apoyo emocional muy importantes para superar el problema.
- Medicamentos: Como hemos visto, hay ocasiones que este problema se da por un desajuste hormonal o químico en nuestro cerebro, por lo que en ciertos casos el uso de medicamentos recetados puede ser de gran ayuda para controlar los impulsos.
- Terapia familiar: La ayuda de la familia es crucial, ya que el apoyo y la comprensión que pueden darle al paciente sus seres queridos tendrá un papel fundamental en el proceso de recuperación.
- Mindfulness y técnicas de relajación: Mantenerse en el presente y controlar el estrés y la ansiedad es fundamental para una buena recuperación. Para ello el Mindfulness y otras técnicas pueden ser una gran herramienta.
En Cúvel Adicciones, nos comprometemos a brindar un apoyo comprensivo y profesional a quienes luchan con la adicción al sexo. Si tú o alguien que conoces necesita ayuda, no dudes en contactarnos. Puedes llamarnos al teléfono 676 71 99 89. Estamos aquí para ofrecer el apoyo y las herramientas necesarias para que recuperes el control de tu vida y te sientas mejor contigo mismo.